En este apartado se recogen experiencias, frases o comentarios de algunos ex-pacientes que quieren expresar sus sentimientos y trasmitir las vivencias que han tenido durante y después de efectuar sesiones de Terapia Regresiva Reconstructiva..
MariaSi tuviera que representar en imágenes la evolución de mi Terapia Regresiva Reconstructiva, lo haría con una mujer sin rostro, arrastrando largas cadenas pesadas que apenas la permiten avanzar unos pasos, dando grandes zancadas al aires sin conseguir su propósito.
Esta era yo antes de hacer mis regresiones, al inicio de la terapia, tras años de tratamiento psicológico.
He ido dejando atrás las pesadas cargas que me han acompañado a lo largo de mi vida, sin saber cuándo y por qué se adhirieron a mí y me incapacitaban para amar y ser amada.
Hoy escribo cuando voy a cerrar esta Terapia Regresiva y me veo con un rostro definido, ligera de cargas, rodeada de los míos: Hijas, familia, pareja, amigos y compañeros. Sé que todavía me queda mucho por realizar pero ya solo es avanzar.
Estaré siempre agradecida a mi terapeuta por mi reencuentro, por la persona que soy ahora, que siempre lo fui y estaba oculto, sólo había que destaparlo.
AnaCuando comencé la terapia, mis objetivos básicamente eran superar una serie de miedos y falta de seguridad que condicionaban mi vida y mi relación con los demás, además de satisfacer mi curiosidad por este tema y “que se podía ver”.
Todos estos objetivos se han cubierto ampliamente, de hecho he encontrado más de lo que esperaba, puesto que he descubierto un inmenso y rico mundo interior y la terapia en si me ha ayudado a quitar todo lo que me impedía acceder a él.
Actualmente mis miedos y la ansiedad han desaparecido, mi relación con los demás ha mejorado considerablemente y sobre todo, y más importante, la relación conmigo ahora es plena. Además, en todos estos meses no he vuelto a ponerme enferma ni padezco molestias físicas que tenía antes de iniciar la terapia, que ha sido una puerta de acceso a mi interior, y que ahora me permite ver la vida desde una perspectiva distinta, poner en orden mis prioridades y tener mayor tolerancia y amor hacia mi misma y hacia los demás. Finalmente, ha satisfecho mi curiosidad acerca de si existe “algo más”. En general ha cumplido lo que yo buscaba y algo más.
JuanA día de hoy he experimentado un cambio muy profundo en muchos aspectos por los cuales me decidí a realizar esta terapia. En los momentos en los cuales decidí pedir ayuda, yo me sentía muy inseguro de mí mismo, sin confianza, cada vez más introvertido, melancólico, con muchos momentos de depresión y tristeza sin motivos aparentes, largos periodos de insomnio, sufría una tremenda ansiedad e intranquilidad. Buscaba salir de esta rutina diaria con ciertas adicciones que no podía dejar, buscaba la evasión a la realidad que estaba viviendo.
He conseguido vencer todas aquellas situaciones que me causaban un terrible malestar en el día a día. Momentos difíciles que no sabía como afrontar, hechos, detalles, miedos, costumbres que se habían adueñado de mi y que ya formaban parte de mi vida con total normalidad hasta cambiarme el carácter y las formas sin darme cuenta. Esos problemas de adicción, desequilibrios emocionales, apatía, dejadez, desgana, tristeza, baja autoestima, irritabilidad, etc. son ya parte del pasado y que recuerdo con amargura pero con la alegría y satisfacción de haber realizado un gran esfuerzo para ganar esta partida.
Antes, el empezar un nuevo día se convertía en una rutina que no me aportaba nada nuevo, solo resignación y pesadez que iban en aumento en el transcurso de la jornada. Hoy todo me resulta muy distinto. He conseguido sacar el lado positivo a cualquier tarea que debo afrontar, por muy insignificante que esta sea. El saber mirar las cosas con optimismo y entusiasmo genera la suficiente confianza en uno mismo para superar después cualquier adversidad que se te cruce.
Sin duda, lo que más me ha causado impresión con este tipo de terapia es el profundo conocimiento de uno mismo que se llega a conseguir. Este autoconocimiento me ha servido de mecanismo para superar todos los inconvenientes y situaciones difíciles con las que uno debe de convivir casi a diario. Ahora sé de mi capacidad y de mis posibilidades para superar cualquier estado que antes me causaba una tremenda negatividad. Sé de los mecanismos de protección que poseo para enfrentarme a cualquier situación adversa que pueda presentarse hoy y de cómo vencerla de la manera más rápida y menos traumática.
Sin duda, este tipo de terapia ha sido muy positiva para mi, lo aconsejo a cualquier persona, el conocerse profundamente es la mejor herramienta que podemos tener para vencer las hostilidades por las que tenemos que pasar diariamente.